En estas páginas continuamos con
un análisis histórico de la adolescencia, pero centrado en nuestro país, a
partir de la consolidación del Estado nacional, bien avanzada la segunda mitad
del siglo XIX.
ADOLESCENTES EN UNA SOCIEDAD
HETEROGENEA
Durante las últimas décadas del
siglo XIX y la primera mitad del siglo XX se produjeron en nuestro país
importantes oleadas migratorias, impulsadas, entre otros factores, por las
crisis económicas y las dos guerras mundiales. Corridas por la falta de trabajo
y el hambre, millones de personas
llegaban a América soñando un futuro mejor.
Los jóvenes eran muchos y solían
venir solos, por lo que sufrían la separación de sus familias y el desarraigo. En
este contexto, el adolescente no tenía lugar para crisis, duelos y este tipo de
conflictos; eran vistos como trabajadores y estaban obligados a insertarse como
tales en el mercado laboral y en la sociedad.
En las siguientes generaciones,
ya asentadas en nuestro país, surgió la preocupación por el progreso económico, el ascenso social
y la formación de los jóvenes.
ENTRE
LA GUERRA Y EL PROGRESO SOCIAL
Una vez finalizada la Segunda
Guerra Mundial comenzó a consolidarse la adolescencia,
independiente del mundo adulto, un grupo social con comportamientos
propios y diferentes del resto. En
nuestro país, en consonancia con lo que sucedía en otros países, se vivía una época de esperanzas en el progreso y el
ascenso social. Era también el periodo en el que las mujeres comenzaron a
integrarse en los ámbitos profesional,
económico y político.
Pero la adolescencia se vivía de
una manera muy distinta de la actual. Las chicas, por ejemplo, llevaban vestido o faldas, siempre por debajo de la
rodilla, y peinados muy producidos. El hombre tenía el poder de decisión y de
iniciativa, aun en situaciones simples.
Por ejemplo, cuando iba a bailar, una chica
tenía que esperar a que un varón la invitara a la pista con un cabeceo. Los
encuentros eran sumamente formales y había muchas reglas de etiqueta antes de invitar a salir a una chica, y luego había
que formalizar la relación.
PAZ Y AMOR
La década de 1960 fue un tiempo
de surgimiento de diferentes
movimientos y grupos de se rebelaron
contra las injusticias del mundo y contra la guerra. Fue una época de gran
rebeldía por parte de numerosos jóvenes que canalizaron su disconformidad de
diferentes maneras, además de la
protesta callejera. Ubicamos en este
periodo dos hitos importantes: la rebelión de los jóvenes franceses en lo que
se conoce como Mayo del 68, y un
multitudinario festival de rock, en Woodstock (EE.UU). La juventud comenzó a
ser vista como una fuerza viva, de acción y de cuestionamiento. Se conformó el movimiento
hippie, que se manifestó contra toda
la clase de violencia y, por eso, adoptó el símbolo de la paz. Estos grupos
también realizaron experiencias que buscaban la exploración personal y la
exteriorización del mundo interior. El consumo de drogas, en especial
alucinógenos y marihuana, era parte de estas experiencias. Aparecieron Los Beatles y los Rolling Stones, dos
bandas que sellaron la identificación de los jóvenes con el rock n´roll.
También fue un momento de fuerte
cuestionamiento a las instituciones, como el matrimonio y la familia
tradicional. Y en su lugar se promovieron el amor libre y al aceptación de la
diversidad. En nuestro país, muchos
jóvenes, en sintonía con estos movimientos, comenzaron a reunirse en asambleas
universitarias, a participar en publicaciones que cuestionaban el sistema, por
ejemplo. Los varones lucieron el pelo largo, y las chicas, polleras cortas y
jeans.
CUANDO SE ASESINARON LOS IDEALES
Para fines de la década de 1960 y
principios de la de 1970, la juventud se encontraba altamente movilizada. Sus
reclamos y expresiones estaban muy marcados por una ideología que veía al mundo
como un sistema injusto. Muchos jóvenes, tanto estudiantes universitarios como
trabajadores, se comprometieron con la militancia en partidos políticos,
agrupaciones sociales y sindicatos. Fue un momento de grandes utopías y luchas
por los ideales. La acción de los jóvenes se orientaba a logar una sociedad
donde no hubiera injusticias.
En algunos casos, a la acción
política se le sumó la acción a través de la lucha armada en organizaciones que
optaron por la violencia para la transformación social. Por eso, también fueron
años de represión, la que, en nuestro país, alcanzó el momento más duro después
del golpe militar de 1976. El gobierno militar se propuso “reorganizar” el
país, para lo cual aplicó la represión y buscó
el disciplinamiento de la sociedad. La dictadura persiguió, secuestró y
asesinó a miles de hombres, mujeres, adolescentes y niños. Se prohibieron las
reuniones en grupo en la calle, la actividad de muchos artistas, políticos y
dirigentes sindicales, y se controló, incluso, la forma de hablar y de
vestirse.
LA GENERACIÓN DE LA DEMOCRACIA
La salida de la dictadura militar y los primeros años de democracia
fueron momentos en los que la
recuperación de la libertad se combinó con crisis económicas y políticas.
Soda Stereo |
La cultura se desplegó en un gran
abanico de expresiones. Luego de años de censura reaparecieron músicos que
habían estado censurados e hicieron su aparición bandas fundamentales como Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota,
Soda Stereo y Sumo. Los recitales al aire libre o en estadios y la difusión
radial de las bandas hicieron que el rock
nacional se consolidara y adquiriera prestigio internacional. Es el momento
de auge de grupos de adolescentes que se identificaban con marcas propias: los
punk, los new romantic, los que pertenecían a “la movida under”, o a la
“contracultura” en la disco Cemento.
¿Qué ocurría en las escuelas?
Poco a poco las pautas autoritarias impuestas por la dictadura fueron dando
paso a mayor libertad y participación de los chicos, inclusive en lo
pedagógico. Resurgieron los centros de estudiantes y se conformaron los
primeros consejos de convivencia.
CONSUMO Y CRISIS
Los adolescentes de los 90 son una de las primeras generaciones
que creció en un régimen democrático. Además, se formaron en un contexto de
enormes transformaciones económicas que
produjeron grandes contradicciones
sociales. Por un lado, el desempleo incremento la pobreza; por otro, la
proliferación de grandes contradicciones sociales. Por un lado, el desempleo
incremento la pobreza; por otro, la proliferación de grandes empresas y el alto
valor de la moneda nacional con respecto al dólar generaron cuantiosas
ganancias para algunos sectores.
Hubo cada vez más pobres que
ganaban cada vez, menos, y ricos que se enriquecieron más. Asi, la sociedad
quedó dividida en pobres y ricos, y una parte importante de la población
directamente fue excluida, privada de
todos sus derechos. Este escenario colapsó a fines del 2001, cuando se produjo
una crisis institucional que provocó la renuncia del presidente de la Nación y
desencadené estallidos sociales y movilizaciones.
A los adolescentes de aquel
periodo les tocó percibir un mundo social en el que el trabajo no estaba
garantizado y el futuro no generaba grandes expectativas. La escuela pública
dejó de ser valorada como el baluarte de la formación personal para una mejor
inserción laboral y para el ascenso social.
La evolución espectacular de las
tecnologías de la comunicación y la información permitieron que los mensajes,
los valores, la música, las mercancías y las costumbres de otras partes del
mundo se impusieran con facilidad. De ese modo, se configuro una lógica global
del mundo y de consumo de productos, también globalizados.
Salud y Adolescencia/ Alejandro
Balbiano
1Ed. Bs As: Santillana, 2011
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