LECTURA COMPLEMENTARIA
LA REVOLUCION FRANCESA
EL ANTIGUO REGIMEN
La Sociedad del Antiguo Régimen
fue el escenario de la Revolución y, al
mismo tiempo, el contexto en el que se constituyeron sus protagonistas
colectivas.
UNA SOCIEDAD FUNDAMENTALMENTE RURAL
A mediados del siglo XVIII, las
sociedades europeas estaban organizadas de un modo muy diferente del que tienen
en la actualidad. En Francia, de una población total de unos 23.000.000 de habitantes, más del 80% vivía en las zonas
rurales. París, la capital, tenía alrededor de 600.000 habitantes. Asimismo, la
precariedad de los sistemas de transporte y de comunicación acentuaba el carácter rural de la Francia del Antiguo
Régimen. La aldea continuaba siendo, entonces, el lugar en el que
transcurría gran parte de la vida colectiva de los campesinos.
Los productos agrícolas eran la
base de la alimentación de la sociedad y, por lo tanto, un elemento importante
de la economía del Antiguo Régimen. El gasto en pan podía significar la mitad
del dinero dedicado al consumo de una familia de los sectores populares; en
consecuencia, los aumentos en el precio del pan solían provocar motines en las
ciudades. Una mala cosecha, a su vez, condenaba al hambre a
numerosos campesinos. Estos datos muestran con claridad el tipo de sociedad características
del Antiguo Régimen. Así, el historiador Georges Lefebvre afirma en su obra, El gran pánico de 1789. La Revolución
Francesa y los campesinos que “En vísperas de la Revolución, para la
inmensa mayoría de los franceses el gran enemigo era el hambre”.
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